miércoles, 25 de junio de 2014

La comida en Alemania: costumbres y manías

La comida es uno de los temas estrella de los que hablamos las au pairs cuando nos reunimos y también el que más críticas genera. Y es que, aunque todas sabemos a lo que nos enfrentamos al venir a un país diferente y, además, vivir en una familia con sus propias costumbres culinarias, no somos conscientes de la realidad hasta que nos estampamos con ella (para bien o para mal).

A decir verdad, cuando elegimos a nuestra futura familia qué desayunan, comen y cenan no es una de las preguntas más frecuentes (a no ser que tengamos alergias, ciertas manías inamovibles o seamos/sean vegetarianos, por ejemplo). Bastante tenemos ya con preocuparnos por los niños, los horarios, las tareas, el Taschengeld o el Monatskarte. Y no es hasta que tu madre/abuela (para las que este tema es de vital importancia) te dice algo como "anda que no echarás de menos el jamón serrano" o "hija, si a ti no te dan bien de comer tú cómprate lo que quieras, ¡a ver si vas a adelgazar!"  cuando te das cuenta de que no tienes ni idea de lo que le deparará a tu estómago en tu nueva casa. La sorpresa está asegurada.

Cada familia es un mundo, sea en Alemania, España o China. ¿Nunca habéis ido a casa de una amiga a comer y os han puesto en la mesa un "manjar" que vosotros ni le daríais al gato? Pues si hablamos de otro país y otra cultura... ¡Para qué más! Puede que las cosas que diga aquí no sean así en la casa de Menganito o Fulanito pero, a rasgos generales, esto es lo que una se encuentra en Alemania cuando entra en la cocina.

  • Los horarios
Esto es lo primero que cambia respecto a España y puede que sea algo difícil de sobrellevar hasta que nos acostumbremos.

-El desayuno. Suele ser entre las 6.30 - 7 - 7.30 dependiendo de los horarios de trabajo de cada uno, también puede ser más tarde pero si tenemos niños que van al cole acostumbraos a tomar los cereales a estas horas.
Los adultos beben café o té y los niños, en mi casa, agua. Siempre me acuerdo de mi madre, para la que el ColaCao de la mañana era la fuente de energía más importante del día y por muy tarde que fuera no nos dejaba salir de casa sin haberlo tomado. Hay otros críos que sí que toman leche, normalmente blanca o con chocolate (este suele ser especial para niños y no tiene azúcar).
Normalmente el café se acompaña con una o varias tostadas. Estas pueden ser dulces, con mantequilla y mermeladas varias, pero lo más normal es tomarlas con embutido o queso. Por lo menos en mi casa no se toman dulces (galletas, bollos, cereales...) aunque sí muesli  (mezclado con yogur o puré de frutas y leche). La nutella y similares se reservan para los fines de semana (por lo menos para los niños). 
Esta rutina es algo diferente los sábados y sobre todo los domingos. Se compran panecillos recién hechos y nosotros nos permitimos el lujo de comer un Croissant. Además, estos días el desayuno suele alargarse más y es más abundante.

-La comida del medio día. Esto sí que se puede convertir en un gran problema. Por lo menos para mí lo fue y todavía lo sigue siendo. Para los alemanes esta comida no es tan importante como para nosotros y suelen tomarse un pequeño piscolabis (un sandwich, una fruta, un café y unas pastas...) sobre las 12. Se supone que con esto en el cuerpo ya aguantan hasta la cena, aunque a mí a esas horas el cuerpo me pide comida de verdad. Los niños, por el contrario, sí que comen una comida decente en la guardería (sobre las 12 y media/1).
Para mí esto fue un shock cuando llegué. El primer día aquí, sobre la una del medio día (que yo ya tenía el desayuno por los talones) simplemente se tomaron un té y los niños un bollito porque según ellos "habían desayunado mucho". Sí, desayunamos mucho, pero de eso hacía 4 horas y yo ya tenía instintos de arrasar la cocina. Poco a poco el cuerpo se me ha acostumbrado a una comida "intermedia": ni tres platos como en España, pero tampoco una triste manzana. Generamente como lo que haya sobrado de la cena del día anterior, un sandwich o, si tengo la vena creativa-MasterChef, alguna invención.
Los fines de semana esta comida desaparece porque desayunan más tarde y más cantidad.

-Kaffestundchen. Esto es, para entendernos, la merienda. Pero la merienda a las 3/4 de la tarde. Es más típico de los niños, aunque yo también lo hago y los fines de semana "sustituye" a la comida del medio día. Es simplemente algo muy ligero que entretenga el estómago hasta la cena: una galleta con un vaso de leche, un trocito de algún dulce, una fruta...

-La cena. Esta es la comida más importante en Alemania y se suele hacer sobre las 6/6.30. Lógica aplastante alemana: la comida que más energía proporciona la hacen al final del día. Dependiendo de la familia esta puede ser la comida como Dios manda que llevamos esperando todo el día o una tortura culinaria más.
En Alemania está muy extendido el Abendbrot, que es simplemente una cena fría que consiste en pan con mantequilla y embutido. Esta es la cena de prácticamente todas las chicas que he conocido y, para las que venimos de países más mediterráneos, se puede considerar casi una tortura. Poneos en situación: has desayunado un café y una tostada a as 7; has "comido" una fruta y un té a las 12; has merendado una galleta y otro té a las 15 y ahora cenas un par de panecillos con embutido o queso a las 18. Y ya con eso en el cuerpo te vas a la cama hasta el día siguiente. Así están los alemanes, que no encuentras a un gordo por la calle ni aunque te lo propongas (y si lo encuentras, seguramente no será alemán).
La segunda opción solo la tienen algunas afortunadas entre las que me incluyo. Esta cena es lo que podríamos decir una comida decente: pasta, verdura, carne, guisos... Mi HM, como ya he dicho muchas veces, es una excelente cocinera y cada día prepara un plato mejor que el anterior. Sinceramente, no me podría imaginar cenar todas las noches pan con algo.

¿Y después? Se supone que después de la cena, se acabó lo que se daba, te vas a dormir y hasta el día siguiente. Pero esto es más teoría que otra cosa, por que a las 21.30/22 una vuelve a tener un hambre voraz. Ellos de vez en cuando pican algo ligero (un trocito mínimo de pan con queso o algo similar) y ¿qué hacen las au pairs? Destapan su suministro privado de galletas/Mars/Twisters/guarrerías varias o, en su defecto, asaltamos el armario/cajón de la cocina buscando algo con lo que contentar al estómago.

Y he aquí el quid de la cuestión. ¿Ser au pair engorda? Si hablo de mi caso, sí. Y por lo que sé de otras chicas, es lo más normal. Es muy fácil engordar justo por este caótico horario de comidas que sufrimos aquí. Es decir, al no tener una comida principal "establecida" (por ejemplo, la comida del medio día a la hora de siempre) una se pasa el día picando. Que si una galleta ahora, que si una fruta luego, que si un par de chocolatinas después... No piensas "no me voy a comer esta chocolatina a las 12 porque sé que en una hora comeré. No, te la comes, porque a saber cuándo podrás volver a comer. Y tampoco es cuestión de hacer una comida tradicional española con su primero, segundo y postre si sabes que a las 18 vas a tener una cena contundente. Y así hasta en final del día, picando por aquí y por allá.
Hasta que el cuerpo se acostumbra a seguir el horario (si es que se acostumbra) pasa un tiempo relativamente largo de adaptación y sin que te des cuenta esos pantalones que te trajiste "algo" ajustados ya no te cierran (true story...). Si añadimos la cantidad de dulces que ofrecen los supermercados y la maldita frase "no me voy de aquí sin probar esto", ya os podéis ir haciendo una idea.


  • Manías y costumbres
El santo pan. En Alemania se come mucho mucho pan (ya veis que en muchas casas es la cena principal) y este suele ser integral o con cereales. En las panaderías hay de muchísimas clases (con pipas de girasol, de calabaza, varios frutos secos, nueces, de centeno...) y se venden como hogazas grandes o panecillos pequeños (Brötchen). Esto incluye el pan de molde, ese gran alimento que no puede faltar en ninguna casa alemana que se precie. Pero siempre, SIEMPRE integral. El pan blanco es un invento del demonio para devorarnos el alma. Esto es así y es inamovible. Y para muestra, un botón. Un día apareció en la casa un paquetito de pan de molde blanco que mi HM había comprado por error. Claro, había que comerlo. Cuando les planté a los niños su tostada matutina con el pan blanco me miraron como si fuera una asesina intentando envenenarlos. "Pero si este pan es malísimo para la salud". Al final conseguí convencerles de que una tostada no les mataría y aún así lo comieron con reservas y de hecho fui yo la que tuvo que acabar con el paquete porque aquí ni lo miraban.
¿Y qué diferencia hay entre el pan blanco y el integral? Después de ver la reacción de los alemanes ante el pan blanco me quedé con la duda. No sé vosotros, pero es el que se ha comido en mi casa de toda la vida y ya me planteaba si sería cancerígeno. Resulta que el pan blanco, al estar hecho de harina refinada, tarda mucho menos en convertirse en energía para el cuerpo y no provocan picos de glucosa, mientras que el pan integral, al llevar el salvado del trigo u otros cereales, el cuerpo tarda más en convertirlo en energía porque le cuesta más "descomponer" estos ingredientes (esto está sacado de no sé qué página de internet, por lo que su veracidad es bastante dudosa, yo de nutrición no tengo ni idea xD). No sé si habrá más diferencias, la verdad, pero ya sabéis,  pan blanco en Alemania, caca.

En cuanto a las barras de pan nuestras de toda la vida, aquí prácticamente no se consumen, se llaman baguette (aunque ya os digo que no es lo que nosotros llamamos baguette, sino una barra de pan) y son algo caras (1 euro y pico).


El azúcar. Si el pan blanco es veneno, el azúcar provoca la  muerte inmediata. Y con esto no quiero decir que en Alemania no se coman dulces, ni mucho menos. Solo hay que pasar por delante de una panadería para que se te haga la boca agua con los pasteles y los bollos. Pero os dejéis engañar por su maravillosa pinta, les falta azúcar. Cuando llegué aquí, una de las cosas que me llamaron la atención fue que al comer pasteles no estaban lo suficientemente dulces. Pero después de cuatro meses, cuando volví a España, todo me estaba demasiado dulce. Y, de hecho, hace poco hice un bizcocho con los niños siguiendo una receta española y puedo asegurar que a todos nos sabía demasiado dulce.
Además, en las cafeterías muchas veces tienes que pedir una bolsita de azúcar porque o te dan una muy pequeña o directamente no te ponen (como en el caso del té, por ejemplo, que es muy normal tomarlo sin azúcar).
Los niños beben un cacao especial sin azúcar e incluso beben zumo rebajado con agua para que este no les proporcione tanta glucosa (el famoso Apfelschorle, zumo de manzana rebajado con agua con gas). En teoría las frutas ya proporcionan el azúcar necesario para el cuerpo, ¡pero cuidado! No os paséis con el plátano o las uvas, que tienen mucha azúcar y "a ver si nos va a dar algo" (palabras textuales de mis niños).
Las chucherías se toma de vez en cuando y, por supuesto, bebidas como la cocacola o similares suelen estar prohibidísimas (apunte curioso: mi HD la toma rebajada con agua cuando tiene dolor de barriga).

Los platos. Yo siempre había oído que en Alemania solo se comían patatas y salchichas y de hecho, creo que es lo primero que se nos viene a la mente cuando pensamos en la gastronomía germana. Sin embargo, aquí también ha llegado la influencia de la cocina italianas y las pastas, pizza y muchos más son platos bastante queridos entre los alemanes. Como nunca he comido en otra casa que no fuera la mía, no sé muy bien qué platos servirán en otros sitios, pero aquí comemos de todo un poco.

BIO. En prácticamente todos los supermercados hay alimentos bio. Estos están muy de moda en este país y puedes encontrarlos por todas partes. Generalmente está el producto en sí (ya sea frutas, verduras, dulces, cereales...) y un par de marcas "bio". Incluso supermercados como Rewe tienen una sección especial dedicada a ellos.

No sé si me olvido de algo, probablemente sí, pero si me voy acordando de las cosillas, las iré añadiendo. La experiencia de ser au pair no tiene solo que ver con viajar y cuidar niños, ni mucho menos. La comida es un aspecto maravilloso que hay que aprovechar al máximo. Intentad no cerraros en banda e ir con el "esto no me gusta" por delante. Realmente, lo peor que nos puede pasar es que nos encante muchísimo algo que luego, en nuestro país, no podamos encontrar. 

7 comentarios:

  1. Me ha encantado esta entrada :)
    Los horarios aqui son iguales aunque si que se cena, y ese cajon magico que tiene toda aupair con guarrerias varias es nuestra salvacion. He de decir que yo si adelgazo
    El pan aqui tambien todo el dia pan pero solo del de molde e integral. La barra es malisima y carisima y si tambien le llaman baguette
    Pero la verdad son adictos al azucar tanto pastel que hacen y todo el azucar que lleva y el bio les da igual
    Besos guapa

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    1. Cuando leo tus entradas, o las de chicas en Estados Unidos y eso, me doy cuenta de que los raros ¡somos nosotros! No ha habido una vez en la que no me hayan mirado como si fuera una pirada cuando he dicho lo de que nosotros cenamos a las 9/10 de la noche jajaja
      Madre mía, y ahora volver a desacostumbrarme... ¡Seguro que vuelvo a engordar!
      Aquí sí que son bastante cerrados con el tema del bio. No todos, claro, porque los productos bio son más caros, pero aún así se llevan mucho.

      Un beso, bonica! :)

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  2. ¡Qué interesante! Supongo que como a todo, al final te acostumbras... pero desde luego a mí me sería muy difícil, jajaja.

    Aquí también es diferente el tema de horarios, manías y recetas. Pero totalmente opuesto a Alemania :o

    Por ejemplo el desayuno está cargadísimo de carne o queso ahumados, pancakes con mermelada de todo tipo de frutas, mucho café con más azúcar... Aunque yo mantengo mi dieta de leche, cereales, y si hay tiempo.. tostadas. La ventaja de vivir por cuenta propia :D

    La comida es también a las 12, como ahí, pero aquí la gente come mucho muchísimo. Me acuerdo cuando llegué, que intenté seguirlos por el tema de "adaptarse", y casi no podía acabar ni el primer plato... y ellos comen primero, segundo, a veces incluso tercero, que es sopa o ensalada (y bien grandes los platos), y postre que suele ser tarta. Eso sí, a diferencia de Alemania, aquí toda la comida tiene azúcar. De hecho hay una tarta que es básicamente azúcar con nata, bañada en almíbar (agua con azúcar).

    Y la cena también la suelen hacer a las 6. Aunque depende de la rutina... yo he llegado a cenar a las 10 en casa de alguien. Básicamente lo hacen cuando acaban de trabajar y demás. Y vuelve a ser otra ración como en la comida, grandes platos y grandes postres.

    Y por último, entre las comidas, aquí es bastante normal "hacer pausas de café / té / pasteles".

    Escribiendo todo esto creo que me da para hacer una entrada xD . Así que dejo de dar detalles, y así me lo guardo para cuando no se me ocurra nada ^^. Pero básicamente es eso... la comida es una locura en todos lados, si comparamos con la dieta mediterránea :D

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    1. ¡No vale escribir comentarios casi tan largos como la entrada! Jajajaja ¿En serio comen tanto? Jolines, ¡y seguro que ni están gordos ni nada! Nosotros somos los obesos de Europa jajaja
      ¿Ves? Ya tienes tema para escribir en tu blog la próxima vez :D
      Un besote, feo! :)

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  3. Hola, acabo de leer tu entrada y la verdad me ha hecho bastante gracia, todo lo que dices es chocante pero cierto. Yo estoy de Au Pair en el norte de Alemania, en Esens un pequeño "pueblo" cerca de Bremen y es justo lo que dices. Desayunar a las 7 una tostadita, "comer" a las 12 un té y cenar a las 6 un panecillo con algo de jamón y queso. Esto es muuuy duro. Por cierto, yo también tengo un blog " http://magaturtegreenbox.blogspot.de/ " :D

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    1. Yo no sé cómo rinden tanto estos alemanes con la poca cosa que comen. Me imagino en mi familia comiendo una manzanita a las dos de la tarde y... Bueno, no lo puedo ni imaginar jajaja
      Me pasaré a echar un vistacillo ;)
      Un beso ^^

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  4. Nooo, por Dios voy a volver rodando a casa... voy a tener que sacar la fuerza de voluntad de Cristo para no engordar. Aunque no me vendría mal hacer la dieta Alemana desde ya.... espero que en Francia sea más parecido a Argentina....

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